Falabella impulsa inclusión social con programa de reciclaje

Como parte de su política de desarrollo sustentable, en noviembre de 2016 Falabella implementó un programa de Reciclaje Inclusivo en sus cuatro locales de Ahumada, en el centro de Santiago, donde se trabaja con cuatro recicladores de base y un reciclador avanzado, quienes tienen la misión de gestionar todo el material reutilizable.

Según la gerente de Responsabilidad Social de Falabella, Pamela Lagos, esta iniciativa la desarrollan con el apoyo del Compromiso Empresarial para el Reciclaje (Cempre), asociación civil sin fines de lucro, compuesta por un grupo de empresas que buscan contribuir a la minimización de residuos y aumento de la tasa de reciclaje.

“Cuando hablamos de reciclaje inclusivo, nos referimos a que con este proyecto -único en el sector del retail- hemos querido potenciar la inclusión social. Nuestra misión es cuidar al medio ambiente, pero también apoyar el trabajo de los recicladores base, contribuyendo a la formalización de su fuente laboral”, enfatiza.

Asimismo, destaca que el programa ha generado un impacto positivo en el trabajo de los recicladores, entregándoles un soporte y una entidad que los guíe y oriente en su oficio. De esta manera, se integran a una organización formal sin perder la independencia laboral.

Lagos agrega que “Falabella es el primer retail que paga por el servicio de los recicladores base por cada retiro de sus residuos, los que varían según la época del año”.

Tal es el caso de Jimmy Muñoz (38 años), quien trabaja como reciclador base hace ocho años, pertenece al Movimiento Nacional de Recicladores de Base, está certificado por ChileValora y está postulando para obtener la certificación de Reciclador Avanzado en la misma entidad.

En 2016 se unió a la iniciativa de reciclaje inclusivo de Falabella en una de sus tiendas en el Paseo Ahumada como reciclador transportista. Actualmente, hace retiros en tres tiendas de la compañía alrededor de tres veces por semana, pero en fechas especiales -como Navidad- va todos los días.

Muñoz asegura que “trabajar con Falabella ha sido beneficioso porque nos abre puertas, podemos demostrar que estamos capacitados para atender a grandes empresas”. A su vez, añade que el tener un ingreso estable le ha cambiado la vida, pudiendo acceder a créditos de consumo y a cosas que antes no podía hacer.

La ejecutiva proyecta que están analizando la factibilidad de sumar a este programa de reciclaje inclusivo, durante este segundo semestre, las tiendas de Falabella Puente, Valparaíso y Biobío.

Además, detalla que están preparando un piloto donde se integren a los Recicladores de Base con gestores de Residuos, y buscarán sumar la certificación de competencias laborales de 31 Recicladores de Base con Chilevalora.